Catedral y Baptisterio de Parma
La Catedral de Parma es una obra maestra de la arquitectura románica, famosa por su cúpula con frescos de Correggio con la"Asunción de la Virgen", una obra de extraordinaria belleza e intensidad. Al lado, el Baptisterio, construido en mármol rosa de Verona, es una joya del arte románico y gótico, con interiores decorados con frescos y relieves esculpidos que cuentan historias bíblicas. Es uno de los complejos religiosos más importantes de Italia.
Este impresionante complejo arquitectónico, construido en el siglo XVI, alberga algunas de las instituciones culturales más importantes de Parma, como la Galería Nacional, el Teatro Farnese y la Biblioteca Palatina. El Teatro Farnese, enteramente hecho de madera, es una obra maestra única, mientras que la Galería Nacional alberga obras de maestros como Leonardo da Vinci, Correggio y Parmigianino.
El Teatro Regio es uno de los teatros de ópera más prestigiosos de Italia, símbolo de la pasión de Parma por la música de ópera. Construido en 1829, albergó las obras de Giuseppe Verdi y todavía hoy alberga el Festival Verdi. El interior es suntuoso, con una decoración elegante y una acústica perfecta, lo que lo convierte en un lugar imperdible para los amantes de la música.
Situado en el corazón de la ciudad, Parco Ducale es un oasis de paz y belleza. Este gran jardín italiano, construido en el siglo XVI, es ideal para caminar, hacer jogging o relajarse a la sombra de sus árboles centenarios. Dentro del parque se encuentra el Palazzetto Eucherio Sanvitale, una pequeña joya del Renacimiento.
Piazza Garibaldi y el centro histórico
Piazza Garibaldi es el corazón palpitante de Parma, rodeada de elegantes edificios históricos como el Palacio del Gobernador y la Iglesia de San Pietro. Desde aquí se bifurcan las calles del centro histórico, repletas de boutiques, cafeterías y restaurantes donde degustar especialidades locales. La plaza es un lugar perfecto para empezar a explorar la ciudad.
Iglesia de San Juan Evangelista
Esta espléndida iglesia renacentista, situada cerca de la Catedral, es famosa por sus frescos, incluidos los de la cúpula, de Correggio. El interior está lleno de detalles artísticos y arquitectónicos, lo que lo convierte en una parada imperdible para los amantes del arte.